Cañón del Río Lobos, magia templaria y naturaleza

Cañón del Río Lobos, magia templaria y naturaleza. Es el primer Parque Natural declarado en Castilla y León y tiene como eje los 20 kms. del Cañón del río Lobos, desde Hontoria del Pinar (Burgos) hasta Ucero (Soria), un río que, como el Guadiana, juega a esconderse en las capas freáticas del subsuelo y reaparecer poco después, serpentear con sus meandros y ofrecer sus aguas al río Ucero junto a su copioso manadero al pie de la Cuesta de La Galiana. Si alzas la mirada a los huecos escarpados de los farallones y por encima se ellos podrás maravillarte ante el vuelo majestuoso del planeo del centenar de parejas de buitres leonados, y hasta es probable que puedas ver águilas reales y perdiceras, algunos alimoches, halcones y otras rapaces. Corzos, ardillas, tejones, nutrias e incluso algún gato montés conforman igualmente la fauna de este Parque. Si lo que te gusta es la espeleología, con las autorizaciones oportunas administrativas, podrás practicar este deporte en donde esté permitido aunque ya quedas avisado de que hay 25 cuevas, 33 simas y cinco torcas en todo el Parque, pero que sólo en unas pocas está permitido el acceso. Famosa es, por ejemplo, la Cueva de La Galiana que tiene 1330 metros, la segunda en longitud de Soria, con cuatro cuatro zonas muy sugerentes, llamadas “el lago”, “el bosque”, “la isla” y “la gran vía”. Dos rutas de senderismo principales están marcadas convenientemente, pero bien cierto es que, por otro lado, puedes andar a la vera del río Lobos sin dificultades en dos tercios de su recorrido por los límites del Parque, siendo el tramo medio, entre la ermita templaria y el Puente de los Siete Ojos, uno de los más frecuentados. Casi en el centro del Cañón, en uno de los enclaves más impactantes del mismo, se encuentra la ermita protogótica de San Bartolomé adscrita a los monjes-caballeros de la Orden del Temple, de la que se cuenta que se halla justo en la mitad del eje peninsular ya que desde la ermita existe la misma distancia al Cabo de Creus (Gerona) y el de Finisterre (La Coruña). Toda la magia de los templarios, con sus misterios, impregna el lugar, del cual se han escrito diversos libros y hasta la televisión alemana se ha interesado vivamente por el simbolismo templario de la ermita. Hay cuatro miradores oficiales para que tus ojos contemplen maravillados el Cañón, pero nosotros te recomendamos especialmente el de la cima de la Cuesta de la Galiana en el p.k. 20 de la carretera comarcal SO-920 (San Leonardo-El Burgo de Osma).